viernes, 6 de julio de 2012

~ Capitulo 26

Perdonperdonperdonperdonperdonperdonperdon por no publicar un mes pero es que no tenia NADA de inspiración... esto de entrar a la preparatoria me esta matando de nervios y bueno...perdonen por la tardanza y por ponerles este capitulo u.u
prometo tratar de mejorar para el próximo e,e


Capitulo 26

- ¿Judith? ¿estas en casa?- pregunte abriendo la puerta de la casa, mientras Jerry bajaba mis maletas del carro. 
- ¡Alex querida!- Judith salio de la cocina y me dio un fuerte abrazo- te extrañe querida- susurro en mi oído
- No tienes idea de lo mucho que yo lo hice también- nos separamos y ella me regalo una sonrisa.
- Acabo de llegar, por poco y no me encuentras-
- Lamento interrumpir pero...¿donde dejo las maletas?- pregunto Jerry con voz entrecortada
- En mi habitación, ¿necesitas ayuda?- pregunte burlona
- ¿Quien me crees que soy? ¡claro que puedo! soy hombre fuerte- Judith y yo reímos. Jerry chasqueo la "molesto" y comenzó a subir las cosas por las escaleras.
- Ahora si- capto mi atención- ¿que paso exactamente con Ian?- eso me paralizo. No me esperaba esa pregunta tan de repente, ¿ahora que le decía? 
- Sera mejor que hablemos después Judith- le di una media sonrisa  al ver bajar a Jerry- con mas calma-
- Creo que eso es todo Alex, si no me necesitas mas me voy-
- Gracias por todo Jerry-
- Para eso están los hermanos enana- me dio un abrazo y un beso en la cabeza-  no te vuelvas a alejar de mi, que no respondo-
- No lo haré nunca mas- sonreí. Lo acompañe hasta la puerta y nos dimos un beso de despedida
- ¿Quieres ir mas tarde a comer o ir al cine? iré con Lauren-
- ¿Y hacer mal trió? no gracias- reí- diviértete tu Romeo-
- ¡Nos vemos!- entro a su auto, antes de acelerar bajo el vidrio de la ventana- por cierto... aun no te salvas de explicar de donde conociste a ese chico- le di una leve sonrisa y entre de nuevo a la casa. Subí a mi habitación antes de toparme de nuevo con Judith cuando el sonido de mi celular me detuvo


"Espero que hayas llegado a casa a salvo, hoy fue un día largo para ti así que descansa bien"

"Gracias Joe, aunque creo que fue aun mas difícil para ti, descansa." - respondí a su mensaje. 

"¿Joe? lamento decepcionarte princesa, pero no soy Joe" - ese mensaje me llego como un cubetaso de agua 
fría. Observe bien el numero con temor y me paralice. Efectivamente no era Joe... era Ian.

Apague el teléfono -como si eso fuera a funcionar - y lo tire lejos. Decidí acomodar de las cosas de la maleta pero ese estúpido mensaje me hacia doler el estomago. Mire el teléfono indecisa pero la curiosidad me venció y volví a prenderlo.
Ningún mensaje nuevo. Suspire.


~Ian

Solté un grito de furia mientras aventaba el teléfono a la pared. ¿Joe? ¿era enserio? no lo conocía en persona y ya me había provocado un ataque de celos.
Me tire en la cama boca abajo, tapándome la cabeza con mi almohada, todo sería mejor si muriera. 

- ¿Qué pasa?- pregunto Rachel entrando por la puerta. Simplemente la ignore.
- Como sea- chasqueo con la lengua- Judith me dijo que Alex iba llegando a casa...- la mire con el rabillo del ojo y esta sonrió- ¿sufriendo?- rió,  ¿esta mujer no sabia lo que era compasión?
- Largo- susurre
- ¡Ah! la cena ya esta servida- dicho eso cerro la puerta con un fuerte portazo. Tomé el celular, ¡genial! tenía la pantalla rajada. 

"Hola bro, ¿como estas?, acabo de dejar a Alex en su casa, probablemente salgamos mañana...sobre ese chico, Joe, no ha dicho nada, espero sacarle algo"

"Dale, yo haré lo que pueda por escaparme de de Rachel"



~Joe


-¿Nana, y la niña?-
-Dormida en su habitación- sonrió. La mire con dulzura y le devolví la sonrisa.
-La dejare descansar, hoy fue un día bastante ajetreado-
-Que diferente eres a tu padre- dijo, haciéndome sorprender. Levante la mirada y la mire fijamente. No supe como diferenciar el tono con el que lo dijo.
-A veces pienso que no- susurre después de unos segundos
-Físicamente eres muy parecido... igual de alto, fuerte, guapo- sonrió nuevamente- pero... todo lo demás es... idéntico a tu madre-
-Cuando me miro en el espejo... me doy cuenta que de alguna forma ella esta conmigo- sonreí con tristeza- sobre todo por mi hermana-
-Eres especial Joseph- su mano rozo levemente mi mejilla. Cerré los ojos disfrutando de ese pequeño tacto casi maternal
-Mi padre quiere casarme- solté de repente. Ahora ella fue la sorprendida
-¿Que?-
-Me lo dijo hace rato, va a casarme-
-¿Pero ese hombre acaso acabo de enloquecerse?-
-Supongo... pero no tengo otra alternativa nana-
-¿Dijo con quien?-
-No dijo detalles...-
-No te veo muy entusiasmado, antes decías que querías crecer para casarte-
-Pero por amor, nana- me aleje un poco de ella- quiere casarme con una desconocida solo por su maldito interés, si el no amaba a mamá y sufrió durante su matrimonio ¿porque quiere hacerme lo mismo a mi?-
-Algo me dice que tu...-
-¿Que yo que? ¿estoy enamorado?- reí- ¿bromeas, cierto? no nana, simplemente no quiero hacerlo por un maldito contrato-

Escuche el llanto de Nicole en su habitación, me levante rápidamente del sillón donde me encontraba sentado y subí corriendo las escaleras. Al llegar la tome en brazos y la acurruque en mi pecho. La abrace fuertemente, sin llegar a lastimarla y le di un beso en su cabeza

-Estoy aquí Nicole... no llores, ya estoy contigo- trate de tranquilizarla 
-Mamá- susurro. El hueco presente en mi pecho se hizo mas grande. La mire a los ojos, tenía la misma mirada que ella.
-Mamá no esta Nicole, se fue- respondí con la voz entrecortada. Ella se abrazo mas a mi pecho y escondió su rostro en mi cuello. Me sente en la cama aun con Nicole en brazos y como pude saque mi celular.

"Hola Alex, soy Joseph... ¿podríamos encontrarnos? Nicole no esta bien"


"Seguro, ¿donde?, ¿ella esta bien? ¿que le pasa?" - reí ante la preocupación de ella. ¿Que persona se preocupa tanto por alguien que acaba de conocer? sin duda Alex era una especie de ángel.

"En el parque de la ciudad, ¿te parece bien?"

"Allá nos vemos en una hora" - 
sonreí victorioso y guarde el celular en mi bolsillo. Tome la maleta de Nicole y le saque alguna de sus ropas para cambiarla.

-Déjame hacerlo- la voz de mi nana me exalto- ¿ saldrás?- pregunto tomando la ropa de mi hermana
-Eh...si, pensé en llevarme a la niña a pasear-
-Oh, siendo así... vete a arreglar tu, yo me encargo de la niña-
-Gracias, nana- le di un beso en la frente y salí de su habitación. Esto era raro, conocí a Alex hace algunas horas y ya sentía que podía confiar plenamente en ella. Tenía "eso" que , por alguna razón te alegraba con tan solo verla.